El Ente foral sigue la estrategia europea apoyando inversiones en empresas sociales con el Fondo de Emprendimiento e Innovación Social
Amaia Arrizabalaga – Análisis y Gestión de Cartera de Seed Capital Bizkaia
En estos momentos, Europa se enfrenta a importantes retos, en lo que respecta a cambios demográficos y envejecimiento de la población, tasas de desempleo, pobreza y exclusión social, y las empresas de Economía Social pueden desempeñar una función esencial en la mejora de las expectativas de la sociedad, y del mercado laboral.
Los países miembros de la UE consideran la Economía Social como sector fundamental para la construcción europea, y pieza clave del desarrollo económico y social de Europa.
Todos ellos están apostando por estimular el emprendimiento social, como respuesta innovadora a la solución de problemas sociales. Entendiendo por empresa social, toda entidad cuya actividad está dirigida a atender una necesidad social.
En este contexto, la Comisión Europea y sus estados miembros, están impulsando el desarrollo de estrategias, programas y normativas reguladoras, que ayuden a potenciar y a incrementar la visibilidad de la economía social, el emprendimiento y la innovación social.
Y, en esta misma línea, la Diputación Foral de Bizkaia, impulsa el Fondo de Emprendimiento e Innovación Social, gestionado por la sociedad de capital riesgo Seed Capital de Bizkaia.
Con ello, la Diputación Foral de Bizkaia quiere dejar patente su apuesta por este sector empresarial, y dar un paso más allá en la promoción del sector empresarial en general, el desarrollo de la innovación, y la creación de empleo y riqueza en su entorno.
La viabilidad de las entidades
Además Seed Capital de Bizkaia, por su experiencia como sociedad de Capital Riesgo, ve necesario hacer énfasis en dos aspectos que considera relevantes para la viabilidad de este tipo de entidades:
- Por un lado, ve necesario trabajar para facilitar el acceso a la financiación de las empresas de la economía social. Para ello, habrá que analizar los instrumentos financieros que son más adecuados y potenciarlos para fomentar el crecimiento de las empresas de este sector.
- Y por otro lado, considera esencial establecer parámetros con los que se pueda medir el impacto social que pueden generar estas empresas. Debería computarse ese beneficio social como parte de la rentabilidad total de este tipo de proyectos y que pueda servir para compensar una rentabilidad financiera menor, en caso de que así fuera. Ello facilitaría el acceso a la financiación de este tipo de entidades.
Como consecuencia de todo ello, es necesario apoyar la innovación social, porque la combinación de innovación y tecnología, con la detección y solución de problemas sociales, permiten mejorar la calidad de vida de muchas personas, poniendo en marcha proyectos que son sostenibles en el tiempo.
Las innovaciones sociales, que combinan valores, conocimiento y tecnología, tienen el objeto de resolver problemas y demandas de la sociedad, fomentando la interacción entre personas y organizaciones, promoviendo la cohesión de las sociedades, para producir resultados e impactos que mejoran la sociedad.
Por todo ello, debemos concluir que la Economía Social se ha posicionado como un pilar fundamental en la agenda europea y, en esta línea quiere seguir tanto la Diputación Foral de Bizkaia, como Seed Capital de Bizkaia, apoyando la puesta en marcha y consolidación de empresas sociales, con el nuevo Fondo de Emprendimiento e Innovación Social.